Situado en plena Villaviciosa, con una piscina para marisco, el recreo de todos los peques. Fuimos a este sitio aprovechando que dábamos un pequeño paseo por la Villa.

El Cachopo.
Pedimos 2 cachopos para compartir. En vez de traernos 2 cachopos, cortados o no, nos han traído 4 cachopinos, uno para cada uno. De tamaño ideal. Bien rellenos de queso, aunque unos más que otros, pero lo bueno es que como están independientes, no se lleva una persona todo el queso.
Estaba bien de rebozado: Crujiente y sin ser excesivo.
Un pimiento por encima con el tamaño justo para cada uno.
Muy bien presentado, casi cocina de autor. Los cuatro cachopos estaban apoyados en un pequeño montón de patatas. Quizás más patatas hubiera sido mejor, pero no es queja.
El plato estaba muy elaborado. Se notó que quería que fuera bonito y que los cachopos tuvieran la misma forma. Por dentro se veía que sobraba filete y lo enrollaron, quedando una pequeña parte con 4 capas de carne. Pero menos mal que la carne era tierna y sabrosa. Quedamos bien.
A parte nos trajeron un plato con salsa de setas. Muy bien pensado, ya que a algunos les encanta la salsa de setas pero otros no. A quien le guste siempre puede coger la cuchara y echar lo que quiera o necesite. Me parece una buena idea. A veces la carne queda dura, sobretodo cuando enfría pero con la salsa la conviertes en algo más blanda y más sabrosa.
A mi me gustó la idea de todo.
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